¡Feliz 2013! Primera
entrada de este nuevo año, he tardado un poco en volver a escribir algo pero
“más vale tarde que nunca” ¿Cómo pasaron las Navidades? Espero que muy bien,
rodeados de las personas que más quieren y deseo que este año les traiga todo
lo mejor. Para mi han sido unas Navidades de lo más ajetreadas, no esperaba que
fueran así, pensé que tendría más tiempo para mis cosas, pero ha ocurrido todo
lo contrario ¡Qué agobio! En fin, ya han terminado y ahora volvemos a la
rutina. Pero no se crean que todo este tiempo he estado ocupada, siempre hay un
huequito para aquello que tanto me gusta: para ver anime. Hoy les traigo una
serie, Shiki, así que si siguen
leyendo es bajo su responsabilidad.
Este anime está sacado de una novela que
consta de un total de 5 volúmenes, fue también adaptada al manga con 9 tomos y
a un anime con 22 episodios más 2 Ovas y yo voy a hablar de ésta última
adaptación. La historia se desarrolla en un pequeño pueblo del interior de
Japón llamado Sotoba a finales del verano. En las afuera del núcleo urbano hay
una extraña mansión con aire occidental llamada Kamemasa a la que se acaban de
mudar sus nuevos inquilinos, la familia Kirishiki, formada por un matrimonio
con una única hija y un par de sirvientes. Acto seguido conocemos poco a poco a
los habitantes de este pueblo de la mano de Megumi Shimizu, una adolescente de
15 años que lo único que quiere es salir del odioso lugar en el que se ha
criado. Está enamoradísima de Natsuno Yuuki, un chico de su misma edad que se
ha mudado hace poco proveniente de la ciudad, pero él no da muestras de
interesarse por Megumi ni por la gente del pueblo. Harta del aburridísimo
espíritu de Sotoba se encamina hacia la mansión de Kamemasa, dispuesta a
relacionarse con gente más urbanita. Sin embargo, la chica desaparece y, cuando
la hayan tendida en medio del bosque, parece muy enferma. Tras atenderla el
doctor Toshio Ozaki, le diagnostica anemia y le pide que descanse, pero la
pobre Megumi muere un par de días después. Gran conmoción para el pequeño
pueblo, ya que una chica tan joven perdió la vida solo a causa de una anemia.
Esto intriga al doctor Ozaki, que no puede creerlo, y más aún se sorprende
cuando comienzan a sucederse más muertes en situaciones extrañas. Los síntomas
comienzan con una anemia y un poco de cansancio y un par de días después la
persona muere ¿Se trata realmente de una epidemia?
Otra persona que también siente curiosidad
por las muertes es Seishin Muroi, amigo del doctor Ozaki y monje local. Además
es novelista y en sus libros habla de Sotoba, algo que ha llamado mucho la
atención de la hija del matrimonio recién mudado a Kamemasa, Sunako, una niña
tenebrosa, que da mucho miedo, pero que se hace la simpática con Seishin y
traban amistad, coincidiendo la mayoría de las veces dentro de una iglesia de
estilo occidental. Ella lo alaga y le explica por qué una niña de su edad vaga
sola por la noche: tiene una enfermedad que la hace vulnerable a los rayos del
sol ¡Qué enfermedad tan rara ¬_¬!
Mientras tanto, las muertes de los
habitantes de Sotoba se van sucediendo extrañamente mientras Natsuno se siente
inquieto: no puede dormir por las noches. Cuando Megumi vivía solía espiarlo a
través de su ventana, mientras estaba escondida en los matorrales. Ahora, a
pesar de estar muerta, Natsuno siente que ella sigue ahí. El cansancio se le
acumula, así que decide ir a casa de su mejor amigo, Tohru Mutou y pasar la
noche. Mientras duermen siente algo, una presencia que entra en la casa de su
amigo y penetra en la habitación en la que ambos duermen. Es Megumi. Su
apariencia ha cambiado y hay algo inquietante en ella. Natsuno no sabe si lo
que está viendo es la realidad o una ilusión, pero es testigo de cómo la chica
muerde a su mejor amigo en el cuello, como si fuera un vampiro. A la mañana
siguiente no hay rastro de lo sucedido esa noche en el dormitorio, no obstante,
Tohru cae enfermo de anemia y termina muriendo. Esto comienza a corroer la conciencia
de Natsuno, que baraja la hipótesis de que Megumi haya vuelto a la vida como
una zombi o un vampiro y así se lo manifiesta al doctor Ozaki, el cual se da
cuenta, en ese momento de que lo que Natsuno apunta, a pesar de parecer
descabellado, puede ser muy cierto.
A la misma vez Kaori y Akira Tanaka, dos
hermanos residentes en Sotoba, intentan trazar un plan para entrar en la
mansión Kamemasa pues el más pequeño de los dos, Akira, afirma que hay algo
extraño con sus nuevos inquilinos. Ambos son sorprendidos por Natsuno, el cual
les indica que están siendo vigilados, mientras hablan intercambian ideas y se
dan cuenta de que piensan igual: Megumi está viva y hay una extraña conexión
entre ella y Kamemasa. Pero ¿cómo verificar si sus sospechas son reales?
Deciden desenterrar el ataúd de Megumi y comprobar si su cadáver sigue dentro.
Esto no le hace mucha gracia a Kaori, que era amiga de la infancia de la
difunta, pero participa de todos modos. Tras una larga y ardua tarea descubren
que el ataúd está vacío. En ese momento Kaori es atacaba por una persona
extraña y salvada por Natsuno. Quien le ha atacado es un hombre que no parece
respirar y que está frío como el hielo, eso quiere decir que está muerto
¿verdad? Abandonan el cuerpo del atacante en medio del bosque y vuelven al día
siguiente para comprobar que ya no está allí. Ahora Natsuno, Kaori y Akira son
conscientes de que la leyenda del pueblo sobre los zombis está cobrando “vida”.
Y podemos ver de primera mano, a través de la propia muerte y posterior
resurrección de Masao Murasako, un joven muy introvertido y celoso, al que su
familia rechaza, cómo se produce el cambio de humano a zombi. Él fue atacado
por el bibliotecario ya convertido en medio de la noche y, las noches
siguientes, su atacante lo llamaba desde fuera de la ventana y Masao, a pesar
de no querer, se veía obligado a abrir la ventana para que el bibliotecario lo
mordiera y chupara su sangre hasta matarlo. Una vez muerto despierta para su
sorpresa dentro de un ataúd, del que no puede salir, por lo que se pone muy
histérico (algo que es normal en él) hasta que alguien levanta la tapa, ese es
Tatsumi, sirviente de la familia Kirishiki. Él le explica todo acerca de su
nueva condición: que morirá si le llega la luz del sol, que es alérgico al ajo,
que no podrá soportar las cruces ni los signos religiosos, no puede entrar en
ninguna casa sin permiso del dueño y que sentirá una insaciable sed de sangre
humana. Si se dan cuenta, todas éstas características son propias de los
vampiros ¿pero no son zombis? Zombis, levantados, vampiros, okiagari o shikis
es lo mismo en esta serie: hace referencia a un muerto que resucita. En el
anime adoptan el término shiki para referirse a los resucitados y además sirve
como título ;-).
A la misma vez que suceden estos
acontecimientos podemos ver como el doctor Ozaki asume los casos de anemia
desde otra perspectiva, ahora que está más que convencido de que los zombis son
los causantes de las muertes más que una epidemia, comienza a cambiar su
táctica y, por supuesto, hace partícipe de sus sospechas a su amigo Seishin, el
cual no duda en ayudarlo. Para ello mantienen a una paciente, con síntomas de
anemia, bien vigilada. Tras varios días de recuperación la mujer se encuentra
mucho mejor, pero algo ocurre: en medio de la noche, alguien llama a la enferma
y esta, como si tuviera un resorte en su interior, se dirige a la ventana
dispuesta a abrirla para dejar pasar a “aquello” que la está llamando.
Obviamente Ozaki y Seishin lo impiden y descubren que una de las difuntas fallecida
hace poco, familiar de la enferma, está intentando penetrar en el hospital para
alimentarse de su sangre. Consiguen ahuyentarla negándole la entrada al
hospital, pero lo peor está por llegar. Pocas noches después reaparece la zombi
con los demás fallecidos del pueblo convertidos y, con la ayuda de Tatsumi, el
cual parece que los lidera, consiguen que el cuerpo de la paciente escape de
dentro del hospital y acaban matándola. Tras esta nueva muerte a Natsuno, Kaori
y Akira solo les queda cerciorarse de que la anciana fallecida se convierta en
shiki también. Pero al llegar esa noche a su casa, Natsuno descubre que su
padre ha dejado entrar a una extraña niña que ha anunciado que su “hermano” iba
a ir más tarde para luego desaparecer misteriosamente. Esto huele a chamusquina
y Natsuno lo sabe. Todo forma parte del plan de Tatsumi. Como el joven se ha
dado cuenta de la existencia de los shikis es preciso eliminarlo ¿de qué
manera? Convirtiéndolo a él mismo en un shiki. Pero Megumi no está conforme con
la actitud que está tomando Tatsumi hacia su amado, ya que ella es quien quiere
morder su cuello. Pero no es la elegida, sino Tohru, su mejor amigo. El bueno
de Tohru se niega, pero las circunstancias lo obligan y, al final lo acaba mordiendo.
Desde que los colmillos de su amigo penetran
en su piel, Natsuno sabe que está condenado. Se lo cuenta a sus amigos, Kaori y
Akira, que lo intentan ayudar, sin éxito a causa de la intromisión, una vez
más, de su propio padre (que hombre tan poco responsable). Para nuestro pesar,
Natsuno muere. Lo mejor es la forma en la que se entera su padre de que su hijo
ha fallecido: llega de la calle y descubre una nota de su mujer en la que le
dice (tan fríamente) que ya que su hijo ha muerto lo abandona porque no soporta
más la vida que lleva en este ridículo pueblo ¡Qué mujer más insensible! ¡Vaya
perlas de padres que tiene el pobre Natsuno! En fin, la muerte del protagonista
es pronto sabida por sus amigos Akira y Kaori, que echan toda la culpa al
progenitor del muchacho (y con toda la razón). Megumi también se entera de este
hecho y, como han pasado los días sin saberse nada del muerto, piensan los
shikis de Sotoba que el padre de Natsuno, al ser de ciudad, ha llamado a una
funeraria fuera del pueblo en la que normalmente incineran a los cadáveres. De
esta forma los muertos no pueden resucitar. Mientras tanto la propia mujer del
doctor Toshio cae repentinamente enferma. El doctor sabe bien lo que le sucede
y mantiene en secreto el verdadero estado de su esposa, la cual piensa usar
como conejillo de indias para poder averiguar los puntos flacos de los shikis.
Sin embargo, duda de que su esposa se convierta finalmente en un zombi y, la
mantiene muerta en el propio hospital casi una semana. Cuando se da cuenta de
que se ha transformado les dice a los demás empleados que no acudan a trabajar,
que quiere estar las últimas horas de vida con su mujer, cosa que es cierta,
hasta determinado punto.
Teniéndola atada en la sala de operaciones
de la clínica y grabando todas sus pruebas comienza con los experimentos; eso
incluye heridas, someterla a objetos religiosos y otras pruebas. Hasta que
finalmente da con la manera de matarla: clavando una estaca en su corazón. En
ese momento su amigo Seishin entra en la sala de operaciones y descubre al
médico cubierto de sangre junto al cadáver de su esposa. El doctor le pide su
ayuda para recoger todas las pruebas, pero Seishin se da media vuelta y se
marcha. Hay una gran brecha entre ambos amigos que se ha creado desde el
comienzo de los casos de muerte por epidemia. Toshio quiere detener las muertes
y acabar con su origen, mientras que Seishin siente empatía por estos seres,
algo que se debe a Sunako, la cual le ha ido lavando el cerebro y haciéndole
ver que tratar de “vivir” no es un pecado, contando con todo lo que dicha
palabra pueda implicar. Es más, el propio Seishin sabe que Sunako y su familia
son shikis y no los desprecia, esto le salva de que Sunako lo muerda. Tras la
muerte de la esposa del doctor, se organiza el funeral, pudiendo ver ahora a un
Toshio mucho más decidido a acabar con los shikis puesto que ya sabe el proceso
que siguen para crearse y sabe cómo matarlos. También advierte el bueno de
Toshio, que poco a poco la población de Sotoba ha ido cambiando: los habitantes
que se han ido son reemplazados por otros que suelen tener una vida más
nocturna ¿extraño? No tanto, los shikis se han vuelto cada vez más numerosos y
poco a poco se están haciendo con el pueblo. Hecho que le queda más que patente
a Toshio cuando es abordado por los propios shikis y por la señora Kirishiki,
Chizuru. Se trata de una exuberante mujer, muy provocativa que se considera a
sí misma una gourmet y que muy pronto irá a visitarlo. Esa misma noche,
mientras el doctor descansa en el jardín oye unos pasos, sin duda se trata de
Chizuru, cuanto se sorprende al abrir los ojos y encontrarse con ¡Natsuno!
¿Qué se creían? El protagonista no puede
morir tan fácilmente. Ahora, como ya habrán deducido es un shiki, pero no uno
cualquiera, es un “hombre lobo” al igual que Tatsumi: ambos pueden moverse bajo
la luz del sol y comer comida normal, aunque deben beber sangre para poder usar
sus poderes. Natsuno le hace saber al doctor que lo va a ayudar a matar a los
shikis y eso lo incluye a él mismo. Mientras tanto, las muertes no han dejado
de sucederse y nuestra querida Megumi recibe un trabajo especial: atacar al
señor Tanaka, padre de Kaori y Akira, y lo hace encantada, ya que ha
descubierto que su antigua amiga se hizo muy íntima de su amado Natsuno en los
últimos tiempos. Irremediablemente el hombre muere, por supuesto, sus hijos
saben los motivos que hay tras su fallecimiento y, cuando resucita, Megumi le
sugiere (maliciosamente) que se alimente de su propia familia, por lo que el
señor Tanaka ataca a su mujer. Nuevamente sus hijos se dan cuenta de lo que
sucede y el pequeño Akira sale en busca de amuletos para proteger a su madre y
evitar que muera. En su camino oye chismes de una nueva muerte, así que se hace
con una estaca de madera y va hacia una casa que supuestamente está
deshabitada, allí encuentra a un cadáver que pronto resucitará e intenta acabar
con él. Pero alguien se lo impide, ese es Tatsumi que amarra al chico y lo deja
allí, para que le sirva al shiki de alimento cuando despierte.
¿Sobra
decir que el muchacho es salvado? ¿Se imaginan por quién? Tatsumi si, y va a la
casa de Natsuno. Al abrir la puerta, el desquiciado padre lo acuchilla, Tatsumi
ni se inmuta y entra en la casa para tener una pequeña charla con Natsuno y
advertirle de que deje de hacer cosas por su cuenta y se una a los shiki que el
mismo lidera o, de lo contrario, tendrá que eliminarlo. De vuelta a la clínica,
el doctor es finalmente visitado por la voluptuosa Chizuru, que lo muerde y le
da cuidadosas instrucciones para que destruya todos los certificados de
defunción que él mismo ha firmado para no levantar sospechas fuera del pequeño
pueblo. A pesar de que su destino ya está echado, Toshio intenta resistir
haciéndose transfusiones de sangre. Como último deseo antes de morir, le pide a
Chizuru que lo acompañe a una especie de cita para que pueda admirar un
festival propio del pueblo. Ella acepta encantada, sin saber la trampa que le
espera. Al llegar al santuario Chizuru se siente cada vez más intranquila hasta
que se quiere ir, aquel lugar no le da buena espina y teme por su existencia.
Le ordena a Toshio que la saque de allí, pero él, lejos de obedecerla la
descubre ante los aldeanos y todos comienzan a darse cuenta que la leyenda de
los okiagari es cierta ¿Cómo puede el doctor desobedecer a Chizuru? Al fin y al
cabo ha sido ella la que lo ha mordido, pero el astuto doctor le muestra otra
marca de mordida en su brazo, alguien lo ha mordido después que ella y ahora no
tiene la obligación de obedecer sus órdenes. Ya se imaginan de quien se trata
¿verdad?
En los capítulos finales asistimos a lo que
llevamos esperando desde el principio: por fin los aldeanos se dan cuenta de lo
que sucede con la familia Kirishiki y comienzan su venganza liderados por
Toshio. Se inicia una caza de shikis sin cuartel, ninguno se salva, son
atravesados con estacas, quemados al sol y enterrados en una fosa común. Los
humanos que aún habitan en Sotoba colaboran en la tarea sin descanso y de
manera eficiente, por supuesto, topan con algunos contratiempos, pero en
general logran alcanzar su objetivo poco a poco. También queda patente el
comportamiento humano que suele derivarse de estas situaciones tan extremas:
cuando un grupo de personas trabajan en equipo para lograr un bien común,
cualquier obstáculo hay que quitarlo de en medio y eso puede llevar a matar a
otros seres humanos ya que la racionalidad no está presente en medio de tanta
violencia. Hecho que podemos constatar cuando la madre de Seishin y los demás
sirvientes del templo son asesinados injustamente por creerlos aliados de los
shikis. Uno a uno todos los zombis son cazados y aniquilados, incluso Megumi y
Tatsumi, el cual se enfrenta a Natsuno y ambos mueren cuando este último
enciende la mecha de una bomba haciéndola explotar dentro de la fosa común en
la que quedaron atrapados. Final triste para el protagonista, pero muere como
un héroe, como debe ser. Sin embargo ¿qué ha sido de la pequeña Sunako? Por
suerte para ella logra escapar gracias a la ayuda de Seishin. Sí, la niña
manipuladora sale ganado con un aliado que la idolatra. Seishin acaba
convertido en hombre lobo y logra salvar a la pequeña en el último momento,
ambos abandonan Sotoba salvando así sus vidas. Seguramente huirán a otro
pequeño pueblo en donde intentarán convertir a toda la población en shikis.
Sunako no es un personaje que me agrade,
tiene el papel de niña desvalida que quiere dar pena a los demás, pero en
realidad es un monstruo y usa a las personas para su propio beneficio. Seishin
me parece una persona débil y sin carácter, un blandengue que se deja engañar
por la manipuladora Sunako. El doctor Toshio, por el contrario, me parece un
hombre cabal, llegando a ser obsesivo con el tema de la caza de los shikis, me
recuerda al doctor House, pero me cae bien. Natsuno, como ya dije, es el típico
héroe que da su vida por el bien de los demás, pero también me cae bien. Kaori
y Akira, que sobreviven gracias a la ayuda de Natsuno, me gustan, son dos
hermanos muy unidos que luchan juntos incluso tras perder a sus padres. La
tímida Kaori se hace fuerte tras vivir la experiencia de luchar contra los
shikis, algo que la hace madurar. Y del resto de habitantes de Sotoba ¿qué
puedo decir? Hay para todos los gustos.
Final de la serie en su capítulo 22 que me
dejó con ganas de otro episodio más. La aldea se quema por completo con los
cadáveres de los shikis en ella y los aldeanos logran escapar, pero lo han
perdido todo. Fin. En mi opinión un capítulo que contara un poco como volvió a
ser la vida en Sotoba después de los hechos ocurridos no hubiera estado de más.
Ni siquiera los dos Ovas resuelven este misterio, simplemente relatan los
sucesos finales de la historia desde el punto de vista de dos personajes más secundarios.
A pesar del abrupto final la serie me gustó mucho. El género de terror no es
muy habitual en el anime, sin embargo reconozco que Shiki me dejó en más de una ocasión con ganas de ver el capítulo
siguiente y en los episodios finales la violencia y la sangre (aunque sea de
dibujos) abundaron muchísimo. Es un argumento algo manido al tratarse de
vampiros o zombis, pero la forma de abordar la historia es entretenida y está
bien llevada. La recomiendo sinceramente. Además la música es muy bonita,
podemos escuchar a la más que consagrada banda de Buck –Tick, que me encanta,
tanto en el opening como en el ending.
Nada más que añadir. Sean felices, perdonen
mi tardanza y esperen mi próxima entrada con ilusión. Nos vemos.
Hola, al final Natsuno muere ya que no se ve si prende la dinamita (solo enciende el encendedor)y tampoco muestran por decir la "explosión" ¿? para mi... su final me decepciono ya que esperaba algo mas sorprendente! :/ no se... es solo mi opinión y la parte que me da penda es cuando matan a Tohru y la enfermera, aj maldita vieja gorda que los delata, D: la enfermera la hubiese matado
ResponderEliminarSi, al final creo que Natsuno muere, aunque si nos fijamos bien, de mitad hacia el final pierde bastante protagonismo. Quizás un final diferente o con un poco más de acción en la que interviniera él le hubiera dado a la serie un broche final espectacular, aunque nos tenemos que contentar con lo que hay. Un saludo. :-).
EliminarHola!
ResponderEliminarHemm,tengo una duda,al final,se supone que el monje se convierte en hombre lobo no? Pero eso paso por que fue mordido pero no matado,igual que natsume,entonces mi duda es,entonces el doctor que también fue mordido 2 veces pero no murió,también debio convertirse en un hombre lobo,no?
Por favor alguien que me avlare esa duda se lo agradecería mucho!^^
Hola!
ResponderEliminarHemm,tengo una duda,al final,se supone que el monje se convierte en hombre lobo no? Pero eso paso por que fue mordido pero no matado,igual que natsume,entonces mi duda es,entonces el doctor que también fue mordido 2 veces pero no murió,también debio convertirse en un hombre lobo,no?
Por favor alguien que me avlare esa duda se lo agradecería mucho!^^